miércoles, 12 de noviembre de 2014

COMENTARIO DE TEXTO - MIGUEL DELIBES

Tema: El buen cazador puede ser amigo de la naturaleza.

Resumen: En este texto Miguel Delibes sostiene como aberración la importancia que le dan algunos cazadores a la cantidad de presas por encima del modo de cazarlas. Identifica como ''malos cazadores'' a aquellos que no se guían por principios morales ni tienen consideración con los animales que cazan, De este modo, afirma que aquellos cazadores que se centran más en el ''cómo''' que en el ''cuánto'', que respetan los cupos de captura y que obtienen el placer de la caza en la manera de realizarla, son los buenos cazadores y los que sí pueden ser amigos de la naturaleza.

Organización de ideas:
Es un texto expositivo-argumentativo y sigue una estructura sintetizante, ya que la tesis se encuentra expuesta al final (coincide con la conclusión).
Pretende persuadir al lector durante todo el texto.
Se divide en dos partes: el cuerpo argumentativo y la conclusión.

+ Primera parte: Cuerpo argumentativo
Podemos dividir el cuerpo argumentativo en dos argumentos principales:

1.- Caracterización del mal cazador: identifica caza con morral. Como consecuencia destaca el rechazo de los ecologistas a todos los cazadores.

2.- Caracterización del buen cazador:
     - Es el que respeta los derechos de los animales y le importa más la manera de cazar que la cantidad de presas.
     - El placer cinegético reside en el cómo y no en el cuánto.
     - Debe guiarse por unos principios morales y evitar; la crueldad, los ensañamientos, grandes mortandades, la explotación de los instintos y necesidades de las piezas para prenderlas...
   
Lo moral del cazador es el respeto a los animales.


+ Segunda parte: Conclusión 

1. Tesis: El mal cazador que no tiene moral es enemigo de la Naturaleza.



Comentario crítico:
La tesis que defiende el autor Miguel Delibes es que el mal cazador, aquel que no tiene moral ni respeta a los animales, no puede ser amigo de la naturaleza, apoyándose en argumentos como el rechazo de los ecologista a los cazadores debida a la generalización que se hace de estos.

El autor, desde su punto de vista, nos quiere mostrar la desconsideración de ciertos cazadores al cazar sin responsabilidad y al encontrar más placer en el número de presas que en la caza en sí.

Pero si con cazar con responsabilidad nos referimos a cazar por mantener el equilibrio de las especies, como muchos cazadores afirman, el argumento es fácilmente derribable.
Las ''especies'' ni sienten ni padecen, los que si lo hacen son los individuos que la forman. Si alguien coge un arma y mata a dos individuos de cualquier especial, esta no se verá afectada y obviamente seguirá en equilibrio, pero esos dos individuos habrán perdido sus vidas. Además, los desequilibrios de los ecosistemas suelen ser causados por los humanos, pues la Naturaleza ya había alcanzado un equilibrio antes de que estos existieran.
En caso de que realmente hubiera una sobrepoblación de alguna especie, deberíamos intervenir de forma no agresiva ni invasora.

Por otra parte, no creo que sea posible que un cazador (''bueno'' o ''malo'') ame la naturaleza y pueda ser su amigo, pues la Naturaleza no es un ente abstracto, está formada por todos los seres vivos que habitan en ella, siendo cada uno de ellos parte de esta.

Enfrentando mi opinión con la de otros cazadores que afirman que cazar es algo natural, algo que nos ha proporcionado comida desde tiempos remotos, he de decir que hoy en día no es necesario cazar para comer, es por ello por lo que la caza está considerada un deporte, una forma de entretenimiento basada en matar. Se antepone el interés de un individuo de realizar un deporte (despreciable en mi opinión) al interés de otro individuo de conservar su vida.

En conclusión, me parece que la mayor aberración ética no es la identificación de caza con morral, como el autor Miguel Delibes sostiene en el texto, sino la caza en sí. El verbo ''matar'' es y será siempre incompatible con cualquier forma de respetar la Naturaleza.



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